Viajar a la India es una experiencia única e indescriptible. Esta tierra llena de contrastes, con ciudades modernas, metrópolis caóticas, lugares de naturaleza virgen, montañas, desiertos y tradiciones ancestrales, es uno de los destinos más buscados del mundo. Estamos hablando del séptimo país más grande del planeta por superficie, así como el segundo más poblado después de China.
Nueva Delhi, Calcuta y Mumbai se encuentran entre las ciudades más grandes del mundo, por lo que también son muy caóticas. No obstante, los aromas, colores y tradiciones hacen de la India una tierra donde realmente se puede vivir una experiencia de vida profunda.
Condiciones sanitarias en la India
A pesar de su belleza, la India también es un país donde las condiciones sanitarias son precarias. Aquí es posible contraer enfermedades endémicas, gastroenteritis o gripe porcina. Además, es necesario saber que en algunas zonas existe la posibilidad de brotes de fiebre tifoidea, cólera y meningitis. Es importante tomar precauciones higiénicas como lavarse las manos con frecuencia, usar geles desinfectantes y beber agua solo de botellas selladas.
En este sentido, debido a la pobreza del país, la atención sanitaria es compleja. Los hospitales no son de fácil acceso, además de estar muy abarrotados. Esto quiere decir que, aunque no es obligatorio contar con ningún tipo de vacuna, sí es recomendable tener al menos las vacunas recomendadas.